Nosotros la recogemos por sus propiedades para equilibrar las funciones del sistema digestivo: favorece la digestión, contribuye a expulsar los gases, reduce la hinchazón y las flatulencias, aunque también posee otros beneficios medicinales.
Como es gratis, cualquiera que se pasee en verano por allí, puede recolectar.
El proceso es el siguiente. Cuando estén abiertas las flores amarillas, que generalmente es en agosto, te vas con unas tijeras y una bolsita, y empiezas a cortar los manojillos de flores. Un gran "criadero" este verano ha sido la cuesta de las escuelas. Seguidamente, se extienden y se dejan secar en un lugar sombreado, pues aunque no lo parezca, están húmedas.
Se van dando vueltas de vez en cuando, hasta que las flores se vayan reduciendo y tendiendo a quedarse molidas.
Una vez secas, se friccionan un poco con las manos para terminar de molerse, y se apartan los pequeños tallitos que hayan podido quedar unidos a las flores.
Después de molidas, se vuelven a dejar secar aún más hasta que se convierten como en granitos diminutos.
Cuando estén del todo secas, se envasan en un bote de cristal. Nosotros la utilizamos en tisanas, se cuece y filtra, y queda una infusión con exquisito sabor a anís. No tiene una caducidad definida, la recolección de un año puede usarse durante otros tantos.
Una vez que termina la floración, que suele ser en Septiembre, estas flores se convierten en grana, que también se recoge de la misma forma anteriormente descrita. La única diferencia es que se almacenan estos granitos que parecen anises. La eficacia es la misma, quizás un poquito más fuerte la grana.
gracias por la explicación de cuando y como se recogen. En los alrededores de mi pueblo hay muchas de estas plantas y ahora ya sé sus propiedades.
ResponderEliminarMe alegro que te haya servido la explicación. El bulbo además es uno de los vegetales más ricos en potasio.
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